En un caso más de prepotencia y abuso de poder por parte de funcionarios educativos, en este caso de la Escuela de Bachilleres del municipio de Xico, Veracruz, hasta la redacción de este medio llegó una carta dirigida a las autoridades de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) y al propio Gobernador del Estado, Cuitláhuac García Jiménez, en virtud de que mediante presión psicológica y amenazas, a pesar de su delicado estado de salud y de ser una adulta mayor, una trabajadora de intendencia fue obligada a firmar un documento en el cual solicitó su cambio de centro de trabajo de la Escuela de Bachilleres de Xico, con clave 30EBH0381E a la Escuela de Bachilleres “Joaquín Ramírez Cabañas”, de Coatepec, Veracruz.
En su escrito, la denunciante -cuyo nombre omitimos para evitar mayores represalias- refiere que tanto Adriana Córdoba Suárez, como Sara Elena Ortiz, Encargada de la Dirección del plantel y Subdirectora, respectivamente, la trataron de manera por demás grosera, lo que la llevó a padecer de crisis nerviosas, situación que la orilló a que tuviera que trasladarse a su domicilio para guardar reposo.
No obstante, estando en su domicilio fue visitada por personal del Sindicato Estatal de Trabajadores al Servicio de la Educación (SETSE), José Eduardo Córdoba, Ricardo Tepo Hernández Y Antonio Cortina, quienes en un principio le sugirieron jubilarse y dejar su plaza administrativa a su hija; no obstante, ante su negativa pues su deseo era continuar laborando como lo ha venido haciendo desde hace más de 14 años, bajo presiones y amenazas la forzaron a firmar un documento en el que “solicitaba” su cambio de centro de trabajo, a la Escuela de Bachilleres “Joaquin Ramírez Cabañas”.
La denunciante señala que Antonio Cortina, encargado de conflictos del SETSE, junto con Adriana Córdoba, quien por desempeñar una labor de confianza estaría impedida legalmente para ejercer funciones dentro del sindicato, la presionaron de tal manera que la amenazaron con que si no firmaba el cambio del centro de trabajo “la iban a poner a disposición” y no contaría con el respaldo del sindicato, por lo que finalmente tuvo que acceder a la petición de los funcionarios citados, para evitar un conflicto mayor.
La afectada, solicita la intervención de Zenyazen Escobar García, titular de la SEV; así como del Gobernador del Estado y de la Contraloría General del Estado, para que revisen su caso y tomen conocimiento de los abusos cometidos tanto por los directivos del plantel como del personal del sindicato SETSE, quienes en contubernio la obligaron a firmar su cambio de adscripción.
Cabe decir que de esta situación ya tiene conocimiento la Dirección General de Bachillerato, misma que inició los procedimientos administrativos correspondientes en contra tanto de la Encargada de la Dirección de la Escuela de Bachilleres de Xico, Veracruz, como de la Subdirectora del plantel, teniendo la última palabra la propia Secretaría de Educación en torno al tema.
Llama la atención, la saña con que dichos personajes actuaron en contra de una humilde trabajadora de intendencia, a quien además de profelirle malos tratos, la condicionaron a cambiar de sus centro de trabajo, por su negativa a jubilarse y por su deseo de seguir trabajando como lo había venido haciendo desde hace 14 años.
Ojalá que las autoridades educativas tomen cartas en el asunto, para conocer de primera mano este caso, y ahora que se ha hecho público, no vayan a tomar mayores represalias en contra de esta trabajadora del sector educativo de Veracruz. Seguiremos informando.
