- Al recibir al mandatario cubano Miguel Díaz-Canel en Campeche recuerda que desde nuestro país, en el puerto de Tuxpan, Veracruz, zarpó el barco El Granma con Fidel Castro y el legendario guerrillero Ernesto ‘Che’ Guevara.
Nidia Miles, enviada
Campeche, Campeche.- Al recibir al presidente cubano Miguel Díaz-Canel en el aeropuerto de esta ciudad, el presidente Andrés Manuel López Obrador recordó y refrendó las “relaciones de hermandad” que México ha mantenido con el país de la isla caribeña.
“Es muy satisfactorio, un gran honor, recibirlo aquí en Campeche, en nuestro país, que es el suyo, en su calidad de dirigente del pueblo digno de Cuba. México y Cuba mantienen relaciones de hermandad política desde siempre”.
En presencia de la esposa del mandatario cubano, la doctora Lis Cuesta Peraza y luego de entonar solemnemente los himnos de ambos países, el mandatario mexicano recordó el vínculo que une a nuestro país con Cuba, recordando, particularmente que desde Tuxpan, en el estado de Veracruz, partió el barco El Granm, “con un grupo de revolucionarios como el comandante Fidel Castro y el legendario guerrillero Ernesto ‘Che’ Guevara para liberar a Cuba de la dictadura de Batista”.
También señaló que “en México, ejerció el periodismo, la poesía y la literatura José Martí, el padre de la independencia de Cuba”.
“Tuvimos también la fortuna de que Pedro Santacilia, otro isleño de corazón, fuera yerno y consejero del presidente más importante en la historia de nuestro país: Benito Juárez García”.
“Nunca olvidaremos al embajador de Cuba en México, Manuel Márquez Sterling, quien defendió en tiempos de canallas a nuestro Apóstol de la Democracia, Francisco I. Madero”, aseveró.
“Tampoco podríamos guardar silencio, callar, ante el hecho histórico de que el barco El Granma, zarpó del puerto de Tuxpan de este golfo de México con un grupo de revolucionarios como el comandante Fidel Castro y el legendario guerrillero Ernesto ‘Che’ Guevara para liberar a Cuba de la dictadura de Batista y, lo más importante, definir por más de 60 años, con la voluntad y el respaldo de un pueblo indomable, la frontera que siempre debe existir en la soberanía y el afán de dominio hegemónico”.
“Por eso y muchas otras cosas más, usted, presidente Miguel Díaz-Canel, es para el gobierno que represento, para el Gobierno de México, un huésped distinguido, admirado y fraterno”, aseveró.