• Titulares de Consejo Estatal de Población, Editora de Gobierno y Registro Civil, incrementan salario a más de 50 mil pesos, revelan datos de Transparencia.
Agencia Espejo del poder
La Ley de Austeridad presentada por el Gobernador Cuitláhuac García Jiménez y aprobada por el Congreso del Estado el pasado 27 de diciembre de 2018 es letra muerta en Veracruz y así lo demuestra el incremento salarial que en el último año tuvieron los titulares del Consejo Estatal de Población, la Editora de Gobierno y el Registro Civil, entre algunas de las áreas de la Secretaría de Gobierno que preside Eric Cisneros Burgos.
Soraya Prado Rivera, Secretaria Técnica del Consejo Estatal de Población, tenía en 2019 una remuneración neta de 31 mil 520 pesos con 14 centavos y en 2020 su sueldo ascendió a 50 mil 302 pesos con 42 centavos, apenas 2 mil 157 pesos menos que lo que gana el gobernador Cuitláhuac García Jiménez, según la reducción del 30 por ciento que se hizo del salario que traía el ex gobernador Miguel Ángel Yunes Linares de 74 mil 938 pesos.
Arturo Domínguez Galván, Director del Registro Civil de Veracruz, tenía en 2019 una remuneración mensual neta de 33 mil 704 pesos con 1 centavo y en 2020, su salario se incrementó a 50 mil 280 pesos con 14 centavos, lo que significa un aumento de casi 200 mil pesos anuales, más de 600 mil pesos en monto total en todo el 2020.
El premio de bonos y sobresueldos, pasándose por el arco del triunfo la Ley de Austeridad y los principios enarbolados por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, también beneficiaron al titular de la Editora de Gobierno, Israel Hernández Roldán, quien en 2019 ganaba 40 mil 15 pesos con 54 centavos y en este 2020 aumentó a 50 mil 280 pesos con 14 centavos, un incremento significativo, también muy cercano al sueldo del propio mandatario estatal.
Los tres funcionarios mencionados, cercanos y consentidos del Secretario de Gobierno Eric Patrocinio Cisneros Burgos, han sido beneficiarios de la máxima que se le atribuye a Benito Juárez: “A los amigos, justicia y gracia; a los enemigos, la ley a secas”.
Como se aprecia en los documentos de Transparencia sobre salarios y remuneraciones, la normatividad en materia de austeridad no es respetada ni por el primer círculo del Gobierno estatal, ya que estos incrementos salariales significativos no coinciden con el discurso de austeridad que ha enarbolado el gobierno estatal.
Si bien, todo trabajador tiene derecho a tener un salario digno, estas acciones no coinciden con el mensaje que este gobierno enarboló en campaña, criticando férreamente los excesos del pasado que hoy copian, para beneficio propio.
“No mentir, no robar y no traicionar al pueblo”, ha dicho de manera permanente el presidente Andrés Manuel López Obrador. Bajo esos principios y bajo la exigencia del mandatario nacional de que se acabaron los privilegios y que su gobierno gobernaría con austeridad republicana, es que surgió la Ley de Austeridad, misma que entre otras cosas, contempla el salario tope que los servidores públicos tendrán al desempeñar sus funciones.
Muchos funcionarios temblaron cuando entró en vigor esa disposición legal, pero ese temor sólo fue al principio, porque a la fecha y en la práctica, dicho tope no es respetado por casi ningún funcionario del Gobierno del Estado de Veracruz. Incluso, los que ganaban menos, este año 2020 subieron su tope de salario de forma inexplicable, como es el caso de los funcionarios enlistados.
Frente a las irregularidades que ya detectó la Auditoría Superior de la Federación, el tema de sueldos, sobresueldos, compensaciones y bonos dará mucho de qué hablar en los meses por venir, porque “la austeridad republicana” quedará severamente cuestionada.
